Diferencias entre mantilla de blonda y chantilly: una guía para entender la distinción
Tipos de mantillas: blonda y chantilly
Existen diferentes tipos de mantillas en el mercado, pero dos de los más comunes son las mantillas de blonda y las mantillas de chantilly. Estas dos variedades tienen características distintas que las hacen únicas y adecuadas para diferentes ocasiones.
Mantillas de blonda
Las mantillas de blonda se caracterizan por tener dibujos de bordes más marcados y se bordan sobre una base de tul. Suelen tener motivos florales y son más tupidas y oscuras en comparación con las mantillas de chantilly. Estas mantillas son más pesadas pero muestran mejor el encaje bordado.
Las puntas en forma semicircular en las mantillas de blonda favorecen al rostro, dándole un aspecto más estilizado. Estas mantillas son ideales para eventos formales como bodas, donde se busca un toque de elegancia y sofisticación.
Mantillas de chantilly
Por otro lado, las mantillas de chantilly se caracterizan por tener dibujos más pequeños y menos pasadas de hilo. Son más finas, transparentes y ligeras en comparación con las mantillas de blonda. Estas mantillas son más cómodas de llevar y dejan entrar más luz en el rostro.
Las mantillas de chantilly son ideales para eventos formales donde se busca una apariencia más delicada y romántica. A diferencia de las mantillas de blonda, las puntas en las mantillas de chantilly son menos marcadas.
Materiales utilizados en las mantillas
Tanto las mantillas de blonda como las de chantilly se elaboran utilizando diferentes materiales. En el caso de las mantillas de blonda, se utiliza un tejido fino y delicado con un patrón de encaje envolvente. Por otro lado, las mantillas de chantilly se elaboran con un tejido más grueso.
Además, las mantillas de blonda suelen ser más pesadas y están compuestas por un 20% de nylon y un 80% de rayón. Por otro lado, las mantillas de chantilly son más ligeras y están compuestas principalmente por tul.
Uso y ocasiones de las mantillas
Las mantillas de blonda y chantilly se utilizan en diferentes ocasiones y de diferentes formas. Las mantillas de blonda se suelen usar en bodas y se colocan sobre la cabeza, mientras que las mantillas de chantilly se utilizan como una capa y son ideales para eventos formales.
En cuanto a los materiales, las mantillas de blonda son más suaves al tacto, mientras que las de chantilly tienen una textura más rugosa. Ambas variantes son muy valoradas y requieren destreza y tiempo de trabajo para su elaboración.
Orígenes y tradiciones de las mantillas
Las mantillas tienen sus orígenes en el año 600 a.C. y han sido parte de la moda española desde entonces. La mantilla española es una prenda tradicional y histórica que se ha elaborado de forma artesanal utilizando tul y bordados finos.
Los dibujos de las mantillas suelen ser de motivos florales, lo que les da un aspecto delicado y elegante. Se estima que se tarda aproximadamente 500 horas en elaborar una mantilla española, lo que demuestra la dedicación y el trabajo minucioso que requiere su confección.
El encaje utilizado para las mantillas puede ser de varios tipos, como el encaje de bolillo y el tul. Las mantillas de bolillo se elaboraban a mano, pero han ido desapareciendo con el tiempo. Por otro lado, las mantillas de tul se dividen en blonda y chantilly, y se caracterizan por sus motivos decorativos.
El uso de la mantilla se ha ido relegando a ciertas conmemoraciones y actos, especialmente en Semana Santa. La Feria y la fiesta nacional de los toros también han estado ligadas al uso de mantillas, especialmente en España.
Las mantillas de blonda son más pesadas y muestran mejor el encaje bordado, mientras que las de chantilly son más ligeras y cómodas de llevar.
La elección de una mantilla dependerá del evento y del estilo que se desee lograr. Ambas opciones son elegantes y sofisticadas, y agregarán un toque especial a cualquier atuendo.
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